martes, 30 de diciembre de 2014

392 canciones de Daniel Johnston para Daniel Johnston



A ninguna carne le interesa ser amada,
en lo más mínimo.

Cuando los días comiencen a irse,
veré que pongan en mi epitafio la letra
de todas las canciones que componen
los 23 álbumes
de un hombre
que es el ser más triste del mundo,
aunque él no lo sepa.

Un epitafio, digno y bueno,
en el cual me regodeo como un pez muriendo.

La tierra húmeda se mete por mi nariz.
estoy teniendo aquella conversación en un atasco,
y tu boca habla
y mi boca escucha
y aseguro, querida, reafirmo,
que el mar es profundo,
y si adentro mueres,
es porque no soportas ser el único pensamiento
inteligible, bajo el agua.

Comenzare a perforar mi corazón,
y con el paso de los días notare, que
lamentablemente el mayor agujero de mi cuerpo
esta consagrado
como un choque de lucidez en la mente
de un enfermo,
como el recuerdo primigenio de un hombre
que ha caminado durante 7 horas
sin rumbo alguno,
porque ha perdido la memoria.

Cada vez que trato de configurar
una idea,
acerca de lo que hago,
del camino que debo tomar,
entonces he olvidado de nuevo lo que pasa,
y la luz es irremediablemente azul y helada.

A ningún ser le interesa comprender que le aman,
a menos
que aquel sentimiento no sea único,
a menos
que el ser en cuestión,
ame.


No hay comentarios:

Publicar un comentario